El joven nacido en Rosario, provincia de Santa Fe, se encontraba en el hotel Interlaken, ubicado entre las calles Vicealmirante O’Connor y Palacios, donde ocurrió el accidente. Luego fue trasladado e internado con terapia intensiva y pronóstico reservado en el Hospital Privado Regional (HPR), ubicado en la calle 20 de Febrero 598.
Según mencionó el Ministerio Público Fiscal Rionegrino en diálogo con el medio La Nación, «la hipótesis principal que se investiga al momento es que se trataría de un accidente en función de los elementos colectados de manera inmediata, aunque no se descarta ninguna línea de investigación».
Por otro lado, el fiscal Martín Lozada sugirió que lo sucedido fue que el joven volvió de una fiesta en el boliche Grisú y se encontró con tres amigos más en una habitación del hotel. Allí, los adolescentes comenzaron a lanzarse «hamburguesas entre sí» en forma de broma, hasta que el chico rosarino se asomó a la ventana y de un golpe leve perdió el equilibrio, por lo que cayó al vacío. Todo esto habría ocurrido alrededor de las 5.50 horas.
Lozada continuó la historia asegurando que el joven se encontraba consciente a la hora de ser atendido, y que en ningún momento perdió el conocimiento. El alumno sufrió un politraumatismo facial y lesiones en las extremidades inferiores. Además, se espera que el Cuerpo de Investigación Forense del Poder Judicial elabore un informe pormenorizado sobre el estado de salud del chico accidentado.
El fiscal concluyó: «En este momento trabaja el gabinete criminalístico y releva el territorio, el espacio donde ocurrió esto. El joven intentó sentarse por sus propios medios, eso es algo positivo. Estamos a la espera de que el cuerpo de investigación forense concurra al hospital y nos de un informe del estado de salud».