Todo comenzó, según señalaron fuentes policiales, cuando los agentes de la Unidad de Prevención de la Policía Local (UPPL) identificaron a tres ocupantes de un un Volkswagen Bora en actitud sospechosa en la intersección de Lynch y Allende. Al ordenarles que se detuvieran, los individuos escaparon a toda velocidad, iniciando una persecución que finalizó a unas quince cuadras de ese lugar en Chilavert al 2500.
Allí, tres personas fueron reducidas tras abandonar el vehículo, pero un cuarto sujeto logró escapar y disparó contra un móvil policial con impactos en el radiador y el capot del vehículo. Aunque la agresión fue respondida por una suboficial, el atacante logró abordar una camioneta Volkswagen Amarok y continuar su fuga.
El prófugo finalmente, fue localizado en un domicilio de Chilavert al 2800, adonde ingresó junto a otro individuo. Con una orden judicial, la Policía allanó la vivienda y detuvo a ambos, completando así el operativo con un total de cinco arrestos. Esta última detención intentó ser impedida por un grupo de vecinos que terminó por enfrentarse a los oficiales, que tuvieron que dispersar el tumulto para efectivizar la aprehensión.
Los detenidos quedaron a disposición de la UFI N.º 7 del Departamento Judicial Avellaneda-Lanús, a cargo de la causa, que imputó a los sospechosos por los delitos de desobediencia y resistencia a la autoridad.
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